Sin productos
El libro recoge trabajos que recuperan la tensión histórica sobre la educación en México y en particular problematiza un hueco de importancia total, el esclarecimiento del sentido estatal de la educación, pues, aunque en sus orígenes la educación tuvo una clara intención regeneradora, su uso y el papel que se le quiere hacer jugar, abre huecos insalvables en épocas de incertidumbre neoliberal. Solo para ejemplificar las implicaciones de esta falta, obviamos que los procesos globalizadores a los que se ha sometido a los que se ha sometido al país se han visto acompañados por el rediseño de los mercados, y uno de ellos, el del comercio de productos ilegales, modificó dramáticamente el campo educativo en Tamaulipas y en el resto de los Estados fronterizos; a la formación que ofrecen las instituciones educadoras, se le oponen las ofertas educativas de los promotores del mercado ilegal. La línea que abre la judicialización del futuro de las nuevas generaciones al someterlos a la promesa de un mercado dividido entre legal e ilegal, coloca el proyecto educativo en el centro del debate: mientras el Estado insiste en su vocación educadora para detener la descomposición social, se acelera hasta colmar las expectativas de niños y jóvenes, la participación primada en la educación, la puesta en riesgo del laicismo y el crecimiento de una burocracia que confunde educación con evaluación, en un escenario donde la educación pública parece perfilarse como el semillero de la exacerbación del crimen.