No hace mucho el marxismo era considerado, en los medios de comunicación mayoritarios, como una reliquia del pasado. La crisis, sin embargo, está obligando a cambiar esa visión incluso a los más recalcitrantes En este nuevo marco, ¿por qué proponer otra vez un compendio de la obra magna de Marx, El Capital? Porque, según el autor de este compendio, El Capital proporciona una clave extraordinaria para interpretar la actual realidad social, en continua y contradictoria evolución. Las categorías clásicas del marxismo –plusvalor, fuerza de trabajo, capital, modo de producción, etc.– no sólo son aquí descritas, sino que se demuestra su validez para la explicación de los principales fenómenos económicos, sociales y políticos que han articulado al capitalismo a lo largo de su historia. Y, sobre todo, la obra de Marx demuestra su eficacia al ser aplicada a la realidad contemporánea: las transformaciones acontecidas en el mundo empresarial y en la clase trabajadora, la irrupción de la externalización, la modificación del papel del Estado sobre la economía, la globalización, son algunos de los elementos puestos aquí bajo la lupa de instrumentos de análisis que proceden de una lectura de El Capital que no quiere ser ni dogmática ni académica, y que es fuente de un continuo estímulo a la crítica de lo existente