El trabajo (en cuanto actividad reproductiva y productiva, no como trabajo asalariado) fue, es y seguirá siendo una de las formas fundamentales de vínculo social, además de la mediación esencial entre el mundo que construyen los seres humanos y la naturaleza. Sin embargo, en la era de la crisis socioecológica global, y de un capitalismo tardío ya más letalmente descompuesto que maduro, sin duda se plantean difíciles cuestiones a la hora de reflexionar sobre el mismo… ¿Debemos restringir el concepto de manera que sólo incluya las actividades realizadas con una contraprestación monetaria? ¿Deberíamos abolirlo, en tal perspectiva? ¿Lo asumimos y sufrimos como un yugo o un castigo bíblico, como alienación y opresión, o bien podemos pensarlo —en una sociedad poscapitalista— como un lugar de autorrealización? Los textos que configuran esta antología, precedidos por una introducción de Jorge Riechmann, aportan nociones que nos ayudarán en la tarea conjunta de formular una nueva ética del trabajo desde una perspectiva socialista y ecológica encaminada a cambiar la lógica que gobierna nuestras sociedades capitalistas.