El silencio es, a la vez, el opuesto de la palabra y la condición de esta. Cada uno de los términos invalida a su contrario pero al mismo tiempo no puede existir sin él, ya que la palabra nace del silencio del pensamiento, o de la emoción, y muere en el silencio de la memoria. Pozzi repasa aquí con exquisita prosa las etapas y desafíos del aprendizaje monástico del silencio mediante la lectura, la oración y la meditación, vehículos todos para alcanzar la más alta de las metas: la propia humanidad. Trismegisto, Egipto es el «templo del cosmos», pues «todos los poderes que gobiernan y actúan en el cielo le han sido transferidos». El Corpus Hermeticum transmite el sentir milenario de los antiguos egipcios, para quienes los dioses siempre estaban cerca, el tiempo era el cumplimiento.