Edward Alexander Crowley (1875-1947), más conocido como Aleister Crowley, fue poeta, alpinista, viajero y escritor, pero también pintor vanguardista, drogadicto, bisexual y practicante de técnicas mágicas, herederas de la Hermandad Hermética de la Golden Dawn, que le dieron la aureola de satanista y mago negro que le valió el epíteto de «el hombre más perverso de Inglaterra». Crowley, que se hacía llamar a sí mismo «la Gran Bestia 666», fusionaría la tradición mágica europea (de raíces egipcias, helenísticas, célticas y hebreas, tal y como se estudiaban en la Golden Dawn) con las enseñanzas de Oriente, como el yoga y el tantrismo –a las que tendría acceso gracias a sus lecturas y viajes–, y con la magia sexual preconizada por la sociedad secreta conocida como O. T. O. (Ordo Templi Orientis), todo lo cual le permitiría fundar una orden de cuño propio, la de la Estrella de Plata. Creador de la ley «Haz lo que Quieras», y fundador en Cefalú de la abadía de Thelema, Crowley fue, en pleno siglo XX, uno de los más singulares avatares del no racionalismo en su vertiente operativa y mágica.