Alberto Iniesta (Albacete, 1923-216) fue obispo auxiliar de Madrid, incardinado en la Vicaría IV de Vallecas. Desempeñó un papel muy activo durante la época de finales de la dictadura y la transición hacia la democracia. Apoyó los derechos básicos de los obreros y militantes, defendió la separación entre Iglesia y Estado, trabajó por la concordia de los españoles –al margen de sus ideas– y fue denostado y amenazado por grupos de extrema derecha, hasta el punto que tuvo que exiliarse un tiempo para garantizar su seguridad. Alberto, tratado siempre en los barrios por su nombre de pila –sin más títulos ni privilegios–, era una persona de extrema sencillez y austeridad, de una presencia cercana, cariñosa y extremadamente comprometida con los pobres y con los derechos humanos y sociales. Hombre de oración, personifica muchas de las referencias actuales del pontificado de Francisco, como la alegría del Evangelio, la defensa de quienes viven en las periferias y la llamada a construir una Iglesia más cercana a los hombres y al mensaje de Jesús. Los textos que componen este libro de homenaje a Alberto Iniesta se organizan en tres bloques. El primero resume su papel de obispo-pastor, de teólogo pastoral y de ciudadano comprometido. El segundo presenta testimonios de quienes lo conocieron y compartieron con él experiencias ricas y profundas. En el tercero, se recupera la voz del propio Iniesta, en forma de poesía y prosa. El objetivo de este libro no es recordar de manera nostálgica e idealizada su persona, sino actualizar su mensaje y su testimonio, porque la aventura del Evangelio sigue abierta y la memoria de la entrañable figura de Alberto puede ser luz y guía en nuestro caminar como discípulos misioneros.