Un denodado esfuerzo por comprender el cambio social y la historicidad hicieron que Marcuse desarrollara todo un trabajo crítico sobre Hegel, la teoría social, el marxismo y el capitalismo tardío. Para ello, recorrió los caminos de la fenomenología, la Teoría Crítica, el radicalismo izquierdista y el arte; integró la obra de Freud, las luchas internacionalistas contra el imperialismo y el Marx de los Manuscritos económico y filosóficos. En La tolerancia represiva y otros ensayos está el Marcuse más radical, el intelectual que convirtió la teoría y el discurso crítico en un modo de transformación de las condiciones de vida en el contexto de una sociedad opulenta. La influencia de su pensamiento llegó, como tiempo después ha sucedido con Chomsky, a todos los ámbitos de la sociedad hasta formar parte de la iconografía de toda una época. Pero su obra sigue dialogando con nuestro tiempo a través de los movimientos alterglobalización.